Conoce 10 síntomas de hígado graso a los que debes prestar atención para evitar que este problema avance en tu hígado hacia cirrosis o cáncer.
Si cuentas con abdomen abultado es uno de los síntomas más frecuente de hígado graso, y puede acompañarse de cambios en las uñas, y presión alta, entre otros síntomas, conócelos a continuación.
- Debilidad o Fatiga
La debilidad o fatiga, según un estudio realizado en University of Newcastle, ocurre en personas con hígado graso y se relaciona con distintos factores.
Entre las causas de este problema se encuentra como causa principal la presencia de alteraciones en el sueño o apnea, interrupción de la respiración durante el sueño.
Otras causas tienen relación con la presencia de síndrome metabólico y producción de sustancias inflamatorias, especies reactivas de oxígeno y ácidos grasos libres.
El hígado no puede eliminar o controlar estas sustancias, esto impacta de forma negativa en el cerebro y músculos y conducen a fatiga.
Así también se ha encontrado fatiga por la falta de actividad física y como respuesta psicológica al diagnóstico médico de la enfermedad de hígado graso.
- Dolor de abdomen
El dolor de abdomen, según un estudio elaborado en University of Michigan, puede ocurrir a causa de la ascitis, es decir, la presencia de líquido en el abdomen.
Para evaluar si cuentas con líquido en el abdomen tu doctor realiza un golpe en el área derecha del abdomen.
En situaciones de hígado normal el sonido será sordo, en cambio sí existe líquido el médico sentirá el ruido.
El médico puede detectar la presencia de líquido en un paciente con hígado graso cuando presenta aproximadamente 1500 ml de líquido.
Una ecografía también puede determinar la presencia de líquido cuando esta cantidad es de 50 ml.
- Alteraciones menstruales
De acuerdo a un estudio en Pontificia Universidad Católica, las personas con hígado graso presentan alteraciones menstruales como el síndrome de ovario poliquístico.
Es por eso que las mujeres con alteraciones menstruales producto del síndrome de ovario poliquístico deberían realizar un chequeo médico para comprobar la presencia de hígado graso.
El síndrome de ovario poliquístico se caracteriza por falta de menstruación o retraso en su presentación y hirsutismo o crecimiento anormal del vello.
La relación entre el síndrome de ovario poliquístico y la enfermedad del hígado se produce por la presencia de resistencia a la insulina.
Asimismo, se encontró una relación entre la cintura y cadera aumentada comparada con mujeres sin hígado graso ni síndrome de ovario poliquístico.
- Náuseas y vómitos
De acuerdo a un estudio en New England Medical Center Hospital, las náuseas y vómitos suelen ocurrir en la enfermedad de hígado graso cuando este se presenta en el embarazo.
Estos síntomas en las embarazadas suelen presentarse a las 36 semanas de embarazo, pero también puede ocurrir antes a la semana 28.
Al ser leves los síntomas de hígado graso, las mujeres pueden no reconocer síntomas antes del embarazo, y encontrarse alteradas las enzimas hepáticas lo cual hace que la enfermedad progrese.
El embarazo puede complicar la identificación de síntomas de hígado graso como el abdomen hinchado, pero si puede expresarse como dolor en el cuadrante superior derecho.
Pueden identificarse otros de los síntomas mencionados en el artículo como las arañitas y eritema en las manos.
- Ojos y piel amarilla en el Hígado Graso
Según China Pharmaceutical University, la coloración amarilla de la piel, llamada ictericia o que aparece en la parte blanca de los ojos se relaciona con la presencia de enfermedad del hígado.
El color amarillo en la piel y ojos se relacionan con inflamación en el hígado y pueden presentarse en forma conjunta con orina oscura y picazón.
El hígado es el encargado de filtrar los desechos de la sangre, la bilirrubina es un desecho amarillo que se acumula en la sangre y cuando llega al hígado se une a la bilis y se elimina del cuerpo.
Si la bilirrubina es abundante porque el hígado no cuenta con la capacidad de metabolizarla y excretarla, esta puede filtrarse a otros tejidos lo que causa la coloración amarilla.
- Mal Aliento
El aliento a etanol y acetona, según un estudio realizado en Johns Hopkins Medical Institutions, pueden presentarse en el hígado graso.
Este síntoma resulta útil tanto para el paciente y su familia que pueden identificarlo como también como prueba clínica médica.
Aun cuando la enfermedad del hígado graso no se asocia al consumo de alcohol el aliento puede parecer a etanol. El cual puede tener relación con medicamentos no absorbidos.
A su vez la evidencia científica indica que el aliento a etanol se asocia a la obesidad y a una enfermedad de hígado grave.
Por otro lado, el aliento a acetona se asoció a la presencia de hígado graso y puede deberse a la oxidación de grasas por un aumento de enzimas.
Otras causas del aliento a acetona es la presencia de diabetes no controlada, obesidad, resistencia a la insulina, enfermedades que ocurren en el hígado graso. (6)
- Cambios en las uñas y manos
En las uñas se pueden presentar dos situaciones que se relacionan con la enfermedad del hígado, llamadas uñas de Muehrcke y uñas de terry.
Las uñas de Muehrcke se presentan como bandas blancas horizontales combinadas con el color normal de la uña.
Las uñas de Terry afectan casi dos tercios de la uña, en la parte más cercana a la cutícula y el tercio cercano a la punta del dedo es rojo.
En las manos puede presentarse eritema palmar, es decir una erupción roja en las palmas de las manos.
- Arañitas e hígado graso
De acuerdo a un estudio previamente mencionado realizado en University of Michigan las arañitas pueden aparecer en el hígado graso.
Las arañitas, también llamadas arañas vasculares o angiomas de araña o telangiectasias de araña son lesiones vasculares que pueden ocurrir en el tronco, cara y brazos.
El número y tamaño de las arañitas se relaciona con la gravedad de la enfermedad del hígado.
Personas que presentan numerosas arañitas grandes tienen un mayor riesgo sangrado varicoso.
Cabe mencionar que las arañitas también pueden presentarse en el embarazo, desnutrición severa y en personas sanas, por lo cual debe relacionarse con la presencia con otros síntomas de hígado graso.
- Abdomen abultado
El hígado graso, según un estudio elaborado en The Canberra Hospital, produce un abdomen abultado como consecuencia de la mala alimentación y la falta de actividad física.
Esto ocurre a causa de una dieta alta en energía que junto al sedentarismo que producen la obesidad en el abdomen.
De acuerdo a Washington University, la prevalencia de hígado graso aumenta de 15% en personas no obesas a entre 40 y 85% en pacientes obesos y extremadamente obesos respectivamente.
El riesgo de hígado graso se relaciona especialmente con la obesidad abdominal lo que se asocia con la resistencia a la insulina y síndrome metabólico.
- Presión alta
De acuerdo a un estudio realizado en City Hospital Birmingham, la presencia de presión alta puede alertar de estar sufriendo de hígado graso.
La relación se establece dado que la hipertensión se relaciona con el síndrome metabólico, la resistencia a la insulina y el desarrollo de hígado graso.
Según el estudio se ha encontrado que personas con hipertensión cuentan una alta prevalencia de hígado graso lo que se relaciona con una mayor resistencia a la insulina e Índice de Masa corporal.
Si presentas uno o más de estos síntomas tu cuerpo te está alertando de que presentas un problema de salud y la gravedad de la situación puede complicarse si cuentas con sobrepeso, obesidad, diabetes, hipertensión.
Un chequeo médico y cambios en tu alimentación evitaran el avance de la enfermedad de hígado graso.
Por Sergio Aceves Gallegos
Salud Integral 